lunes, 17 de diciembre de 2007

[Entrevista] Ediciones BajoCero: Dos años haciendo camino en la difusión cultural

Entrevistamos a Ediciones BajoCero, hacemos un repaso por su pequeña o larga andadura en lo que se refiere a la difusión cultural. Durante la entrevista, salta a la vista que BajoCero es un proyecto un tanto extraño en cuanto a las formas, o al menos así lo definen sus componentes, pero lo que si queda patente es que la seriedad, el compromiso y el altruismo son tres ejes desde donde parte todos sus iniciativas, que ahora cumplen dos años.

LH. ¿En que consiste vuestro proyecto y que expectativas de futuro os proponeis?
En principio nuestro proyecto quiso consolidarse como una iniciativa de distribución y edición alternativa de materiales surgidos desde y para los movimientos sociales transformadores y anticapitalistas. Cuando el proyecto surge, como escisión de la distrieditora antagonista SKP quisimos desarrollar una estructura seria y más disciplinada con tendencia a una especie de “crecimiento”, conseguir una estabilidad que asegurara la viabilidad del proyecto, lograr una presencia física de nuestras ediciones en todas partes del Estado. Esa seriedad se perseguía sobre todo editando determinados materiales de lectura, provenientes de firmas reconocidas y de cierto prestigio en el mundillo del pensamiento crítico, buscando una línea editorial que cumpliese un perfil de aparente “nivel”, centrándonos en hacer una distribución mucho mas intensa… Tras problemas y nuevas historias internas, salidas de miembros del colectivo… etc hoy día seguimos en la misma línea ideológica, pero ciertamente sin buscar ese “nivel”, mucho mas quemad@s con muchas mas cosas, y sin ningún interés en llegar a todas partes. Internet está ahí y nuestros materiales se ven influídos por esa saturación de información y productos culturales que la red proporciona. Por eso mismo, colgamos de manera gratuita todas nuestras ediciones en nuestra web. Nuestras ediciones en lectura suelen moverse relativamente bien, pero sólo tirando de redes e infraestructuras afines al rollo, aunque no plenamente anticapitalistas. Es decir, puedes encontrar algunos de nuestros libros en librerías comerciales, aunque orientadas políticamente. No nos parece incoherente; no menos que cobrar el paro o acudir a la seguridad social para curarte. La distribución alternativa, de distris como la nuestra y demás, no se nos da muy bien. No entraré en debates espinosos en esta cuestión, pero baste decir que en los años que llevamos en esto no vemos condiciones objetivas para que el rollo progrese. Más no es mejor. Internet tiene que ver mucho con esto. Entonamos un mea culpa al respecto, claro que sí.

En cuanto a ediciones en audio, hemos decidido romper con los profundos estereotipos uniformantes y castrantes que imperan en la música “radikal”. No queremos punk, sin ir mas lejos, a menos que los grupos de música estén formados por personas con militancias y compromisos serios, sólidos y profundos y sus mensajes dejen de lado el destructivo tema de las drogas y los topicazos del lenguaje soez y la violencia gratuita y de pose. Vamos, que será muy difícil encontrar en las ediciones de Bajo Cero a grupos de jovenzuel@s emporrados chillando por la autogestión y la violenta destrucción del sistema mientras viven a costa del sueldo de sus padres. Son muchos años viendo este cuadro repetido una y otra vez, viendo lo infértil y dañino que ha resultado, como para hacerle un hueco en nuestras escasas capacidades de edición. Ya hay decenas de iniciativas abiertas en ese aspecto en el Estado. Así que en lo musical tiramos por editar materiales que ciertamente no han tenido ni tienen de momento cabida en la música “alternativa”. Preferencia por la electrónica, la experimentación y el ruidismo, sin olvidar la canción de autor, el pop o incluso el hardcore straight-edge o el grind, siempre y cuando a la música se le tenga un respeto (algo no muy extendido hoy día). Consecuencia de todo ello: nuestras tiradas físicas de los discos no suelen superar las 20 copias… no las vendemos. Tampoco nos importa demasiado. Esto, ante todo, es para divertirnos y expresarnos.

También hemos hecho alguna incursión en el tema del vídeo, ayudando a coeditar el DVD en apoyo a Jeff Luers.

Para financiarnos, además de poner dinero de nuestros bolsillos y sueldos de explotad@s si se tercia, hacemos chapas, llaveros, tiradas y maquetaciones de CDs y libros para colectivos, grupos de música, individualidades … también tenemos un estudio de grabación y sonorizamos pequeños actos, todo a precios realmente accesibles para colectivos y bandas comprometidas. De todo un poco.

Por otra parte, decir que nuestras ediciones están a precios realmente bajos, siguiendo las pautas que se han venido marcando en los diferentes encuentros de distribuidoras a nivel estatal a los que hemos asistido. Discos a 1, 2 y 3 euros, libros a 6… nunca el PVP ha de triplicar el coste de edición y distribución. Y si te parece caro, te lo bajas de nuestra web.

En cuanto al futuro… bueno, no se si como Bajo Cero o con otra fórmula, pero seguiremos editando y distribuyendo en la medida de nuestras posibilidades y las posibilidades del contexto. No se descarta –nunca se descarta- la posibilidad del autoempleo y la plena autogestión, pero habría que replantearse muchíiiiisismas cosas, empezando por ver si merece la pena darse palizas de curro impresionante para apenas llegar a final de mes. De momento, ya tenemos una edad y sabemos que estaremos en esto de no creerse el discurso oficial y actuar en consecuencia ( mal o bien, poco o mucho) aún una buena temporada.

LH. ¿Que es lo que busca BajoCero a la hora de editar un trabajo?

Pues varias cosas desde diferentes enfoques, y dependiendo de la etapa en que se produjo la edición. Aclaro desde ya que salvo dos títulos concretos que seguimos teniendo en distribución, el resto de libros de Bajo Cero fueron obra de gente que ya no sigue en el proyecto y que por diversos acuerdos, dichos títulos ya no forman parte de nuestro trabajo. Pero si puedo referirme a ellos al responder a esta pregunta. Buscamos, ahora o en su momento:

Promover materiales prácticos y formativos: manuales de acción directa no-violenta, dossieres sobre el Complejo Químico Militar de La Marañosa … etc

Editar productos más artísticos y literarios (poesía, música instrumental y de vanguardia..) que llenen un hueco que apenas existe en la distriedición alternativa: el del disfrute del arte y la cultura en un contexto transformador sin necesidad de tragarte panfletos infumables: además de gritar que no nos gusta ser explotados, también nos gusta reflexionar sobre lo pasajero de nuestras vidas, los azotes bioquímicos que llamamos amor y tal y tal… y todo eso tiene –ha de tener, ostia!!- su espacio, y bien destacado, en la escena anticapitalista.

Apoyar económicamente diferentes causas con cada edición.

Difundir luchas y líneas de pensamiento que cuestionen o proporcionen datos para cuestionar el espectáculo en el que vivimos. Igualmente, en el tema musical, ir a machete contra los estereotipos y actitudes clonadas, televisivas y triburbanistas de estéticas y modas casposas y destructivas para el movimiento anticapitalista.

Me gustaría decir que no perder dinero con cada edición, pero de momento, en la actual etapa, eso no se ha dado… tampoco nos importa mucho mientras nos sigamos financiando de otros modos. Y por ultimoQuedarnos mas anch@s que larg@s y tener cosas por las que sonreír el día que nos muramos.

LH. En estos dos años de andadura en la edición y distribución alternativa ¿cual es el balance?

Bueno, el balance ha de abarcar unos quince años en realidad; por el 93 que es cuando algunos de los hoy presentes en Bajo Cero empezamos a mover puestecillos de panfletos y fanzines, editar maquetas cutres de hardcore cutre de manera autónoma. Mas tarde, ocho años de actividad en SKP, y finalmente esta historia de Bajo Cero. El balance es que podríamos estar mejor situad@s, mejor distribuid@s y mejor considerad@s en el circuito alternativo, pero que ello supondría entrar en dinámicas propias de mercado, que de momento no nos interesan y simplemente nos agota pensar en ellas. El balance es que somos unos frikis que operan en un contexto que consideramos el correcto, pero ya no nos esforzamos en salvar a nadie siendo la ostia de revolucionarios. El balance es que esto es divertido, llevadero y que quien quiere usar nuestras ediciones, las usa y que no merece la pena esforzarse en llegar a mas gente ni predicar a nadie.

LH. ¿Como veis el panorama actual en el estado español en lo que se refiere a la edición anticomercial y los diferentes proyectos que existen más o menos consolidados?

Creemos que los puntos más sólidos de distribución y edición alternativa son los que de alguna manera se han apoyado parcial o puntualmente en determinados aspectos de la distribución comercial. No nos parece mal, y menos cuando tantos años más tarde se han consolidado como iniciativas serias que en cierta medida dan un porcentaje de sostén seguro a proyectos como el nuestro, y que a pesar de poder haber crecido de mala manera, se han negado, han seguido ahí, manteniendo la autocrítica, la línea ideológica, siempre con los pies en la tierra y no dejándose llevar por el canto de sirena de la pasta. El tiempo nos pone en nuestro lugar, y quince o veinte años mas tarde, gente como Virus, Traficantes de Sueños o iniciativas editoriales relacionadas con la DDT ocupan un lugar que es simplemente necesario, coherente y ciertamente combativo. El resto – y ahí estamos Bajo Cero, faltaría mas- es un maremágnum caótico y guadianesco que no supone amenaza real alguna al sistema, pero que es necesario mantener y cuidar, fortalecer, porque en ello habita el sustento cultural de otro mundo posible.

LH. ¿Que opinion os merece sacar la edición anticomercial de los sitios concretos en el que se mueve actualmente, es decir, que se ponga a la venta en el circuito comercial?

Si la nuestra fuera una iniciativa autogestionaria, una editorial, un sello de música, una serigrafía, llevadas horizontalmente, una empresa dirigida por sus obrer@s, nos parecería inevitable y muy digno, imprescindible para poder comer. Entendemos que hay fórmulas mixtas, y ojalá el mundo fuera en blanco y negro. Pero si somos y vamos definiéndonos como colectivo (no es nuestro caso, Bajo Cero sólo somos dos frikis con dificultades para hacer vida social… eso no es un colectivo!), el poner materiales nuestros en tiendas comerciales sería algo a mirar con lupa. Hay librerías y tiendas de discos honestas y coherentes, imagino, y es ahí donde quizá podrás encontrar algún libro de Bajo Cero. El pequeño comercio frente a las franquicias y las grandes superficies es también un factor a tener en cuenta. De todos modos, el plantearnos poner nuestros materiales en determinados lugares sólo vendría dado por el “querer llegar a mas gente”. Y de momento no queremos llegar a mas gente… para que? Nuestras ediciones están colgadas gratuitamente en la web. Quien quiera que venga, y si de verdad le gusta lo que ve, lee y escucha, valora nuestro esfuerzo y el de los autores que editamos, que nos pille un disco o un librito. No vamos a andar desarrollando campañas de mercadotecnia para salir en todas las “revistas+CD”, webs y medios alternativos del Estado, dando la plasta a la gente con promociones y mailings constantes, braseando para que nos hagan reseñas… no somos una empresa, y al margen de no serlo por principio, no lo somos por vag@s. Lo que editamos es correcto y atractivo, pero no imprescindible, ya hay muchas editoriales y sellos haciendo una labor semejante, no somos tan especiales como para dar la vara a todas horas.

LH. BajoCero en sus ediciones y coediciones incorpora las nuevas licencias creative commons, ¿porque os replanteasteis utilizarlas?

Sobre todo para ayudar a difundir la idea de que la producción cultural es mas efectiva y transformadora, liberadora, bajo libre distribución, pero, que si es necesario, el autor puede obtener beneficios para sí de su trabajo, lo cual es perfectamente defendible. También para, extendiendo este concepto de los Creative Commons y el Copyleft, echar una mano –casi testimonial- en fomentar y promover popularmente unas reglamentaciones jurídicas que posibiliten el debilitamiento y posterior desaparición del actual sistema de derechos de autor.

LH. ¿Como puede afectar a la edicion anticomercial la nueva oleada de represión intelectual que a traves de la SGAE, principalmente, se esta dando?

El tema es no achantarse y plantar cara, ayudar a sentar bases jurídicas para el fortalecimiento de otra forma de implementar jurídicamente la relación del creador y su obra. En este combate puede haber bajas y heridos – ahí tenemos a los compas de alasbarricadas.org, o el actual caso de Pascual Serrano en Rebelión – pero para eso estamos en esta brega. Tod@s podemos caer víctimas de un montaje paripé como el de Alasbarricadas.org, así que más vale que apoyemos las herramientas que combatan, efectivamente y desde los tribunales (la lucha en la calle siempre, ojo) el uso-abuso del concepto de derechos de autor. Si el caso de alasbarricadas.org se convierte, lo dejamos convertirse, lo interiorizamos como una derrota, creo que cundirá el desánimo y el temor y eso es peor que pagar una multa. Esto en cuanto a internet. En lo que respecta al puro subsuelo y la vida en la calle, los tenderetes y puestecillos de festis, convenciones, conciertos, centros sociales, sindicatos de clase… no nos hemos de preocupar mucho… nunca lo hemos hecho, caramba. Sólo hemos sufrido ataques serios desde que tiramos de Internet.

LH. ¿Que papel pueden desarrollar las editoriales anticomerciales frente al imperio de los derechos de autor?

Con los pies en la tierra, simplemente ayudar a crear una nueva conciencia del libre acceso a la cultura, fundamentada ideológica y legalmente. En todo caso, crear un área mucho mas correcta de trabajo para el autor. Los conciertos, presentaciones de libros, debates y defensas de su obra en actos públicos con puesto de venta incluído ,habrán de convertirse en una forma de ganarse la vida – si ese es el objetivo- mucho más habitual para el autor. Ya no valdrá sólo editar un libro y esperar pillar su porcentaje de las ventas. Ahora el autor se convertirá por narices en el más coherente agente de ventas de su propio producto. Por lo demás no vamos a hacer la revolución con esto, señores/as. El ciudadano medio se descarga todo a cascoporro, socializa per se los productos audiovisuales de las multinacionales, gracias a la tecnología desarrollada por las mismas multinacionales. Y tiene una ligera idea de que los discos, los libros, los DVDs tienen un precio inflado, pero no piensa actuar para evitarlo. Simplemente lo pilla del mercado negro.

LH. Nada más que desearos suerte en vuestro proyecto y podéis decir lo que queráis para terminar

Madrid está muy mal… pero que muy mal. Poco hay que rascar. Pero ahí andaremos rascando, con unos y otros. ¿O nos pasamos al ladrillo, el fútbol y el golf?. No nos tomamos muy en serio nada porque cuando nos muramos no nos llevaremos nada a ninguna parte. Ni la dignidad. En realidad todavía no tenemos muy claro, en 15 años, porque seguimos en esto, hay que joderse. Será que el mundo que nos oferta falsimedia no termina de convencernos…

Gracias La Haine por fijaros en este proyectillo nuestro. No hacemos mucho ruido, pero nos habeis “pillao". Fuerza con el portal.

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Rafael Alamillos
Miembro del Colectivo Editorial de La Haine

Publicada el 5 de Diciembre

sábado, 8 de diciembre de 2007

Un año caminando en la labor del derecho a opinar

Un día como hoy, 9 de Diciembre, nació "Con derecho a opinar" . Las intenciones que me llevaron a unirme al entramado de la blogsfera, tal y como se la denomina, fueron en principio bastante humildes, tanto en su contenido como en lo que a la experiencia personal se refiere. El tiempo ha hecho posible que el contenido y lo personal hayan avanzado en una dirección elegida, convirtiéndolo en un espacio más en el que trabajar lo sano de la vida, el aprender, el compartir, el avanzar hacia una más o menos plenitud personal.

Las inquietudes humanas deben de progresar a su libre albedrío, dejando a un lado las presiones externas, haciendo de ellas pasos en los que con el tiempo, paso a paso, vamos explorando. Así pues lo que intente con el blog, es ahora uno de esos caminos en los que en el día a día voy haciendo, con paciencia, sin pausa, pero sin prisas....el tiempo apremia compañer@s.

Cortas reflexiones entorno a la red rebelde

Internet: Comunidad y disidencia.
Internet se ha convertido en el mayor medio de expresión y difusión conocido en la historia, ni la imprenta de Gutenberg podría hacerle sombra al gigante de la red. Como fenómeno tiene diversas interpretaciones, y es que puede considerarse como el símbolo de que lo que vaticinaba Orwel se hace realidad o bien se puede presentar como una herramienta valida y eficaz para dar voz a quien no la tuvo ni la tiene. Desde el optimismo, me quedo con la segunda. Sin obviar ni olvidar el avance represivo y los pasos dados desde el poder con el afán de persecución y control en torno a la red, Internet se ha convertido a día de hoy como el mejor escaparate para los sin voz, para quien esta lejos de grandes campañas publicitarias y ostentosos soportes del marketing. Una red de redes en las que circulan opiniones, análisis y actualidades silenciadas desde los medios oficiales, una red comunitaria en la que hay espacio para el debate y la discusión. Un red comunitaria al servicio de la disidencia.

Contrainformación: A un paso de la alternativa real
Hoy por hoy el termino contrainformación en los entornos politizados esta totalmente normalizado, a nadie ya le asaltan dudas en torno a su significado. Los portales webs de información alternativa que nacieron a finales del pasado siglo y a principios del XXI, se han ido consolidando hasta representar la ultilidad y la veracidad en cuanto a su labor. La Haine.org, A-Infos, los Indymedias o Rebelión.org eran algunos que ya comenzaban esta labor de la contrainformaición. Proyectos periodisticos no profesionales que se presentan como soporte de las distintas luchas habidas en el mundo. Desde hace un tiempo a esta parte han ido surgiendo numerosos proyectos de contrainformación, ya sean locales o nacionales o de una lucha especifica. Kaosenlared, Insurgente, GAS y muchos otros se han ido consolidando como espacios habituales que visitar para estar informado.


La característica más importante de estos medios alternativos, y por la cual han conseguido ser un referente, es el estar integrados en los movimientos sociales y en las distintas luchas. La contrainformación no es un ente alejado de estos, es una herramienta más, un paso más integrado en la cotidianidad de todas las personas que de una manera u otra trabajan por el cambio social y contra las injusticias. Han conseguido convertirse en su voz, una voz que la construyen sus propios interesados.

Este ultimo, es el paso que queda por terminar de dar, el de integrarse y hacer integrar a los movimientos sociales en los proyectos de contrainformación. Solo de esta manera, cuando todos-as sintamos como nuestros estos proyectos y trabajemos para su consolidación, solo entonces la contrainformación sera una alternativa real y consciente de su gran labor.

Ultimando...
Como decía al comienzo, un humilde espacio como este, llamado blog, ha representado para mi el comenzar de una andadura en espacios no explorados. Espacios como la información alternativa o el análisis, han aparecido en mi ajetreada vida catapultados desde una lanzadera, que un día como hoy titule...."Con derecho a opinar".

Gracias a todas las personas que me han animado, ilusionado y motivado en esta labor, lo habeis conseguido, ya soy un friki de la red.


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Rafael Alamillos
Miembro del Colectivo Editorial de La Haine
[9 de Diciembre de 2007]